Ansiedad: el cannabidiol como tratamiento potencial para los trastornos de ansiedad

Cannabidiol como tratamiento potencial para los trastornos de ansiedad

E. Bendición, MM Steenkamp, ​​J. Manzanares, CR Marmar

2015

CONCLUSIONES CLAVE:

• La evidencia preclínica respalda firmemente el potencial del CBD como tratamiento para la ansiedad
• En los perros, la ansiedad es responsable de la depresión, la agresividad, la inquietud y las conductas destructivas y compulsivas; también afecta la calidad de vida de los perros de manera significativa y negativa
• Los gatos tienen comportamientos similares relacionados con la ansiedad, siendo la inquietud, el temblor, la agresión y la disminución del apetito los problemas más preocupantes. El aislamiento y las actitudes antisociales también son comunes.
• El 68,75% de los estudios revisados ​​demostraron los efectos ansiolíticos del CBD
• El CBD redujo la ansiedad inducida experimentalmente en sujetos sanos y redujo la ansiedad en pacientes con trastornos de ansiedad social (SAD)
• El CBD administrado sistémicamente redujo los aumentos agudos en la frecuencia cardíaca y la presión arterial producidos por estados de ansiedad elevada
• El CBD bloqueó la reconsolidación de recuerdos desagradables en ratas y mejoró la extinción de los recuerdos de miedo en humanos sanos
• Los estudios experimentales en humanos ponen en evidencia el excelente perfil de seguridad y los efectos sedantes mínimos del CBD

OBJETIVOS E HIPÓTESIS → ​Los trastornos relacionados con la ansiedad se asocian con una sensación de bienestar disminuida. En los perros, la ansiedad es responsable de una serie de comportamientos perturbados, entre los que se encuentran la depresión, la agresividad, la inquietud y los comportamientos destructivos y compulsivos. Además, afecta la calidad de vida de los perros de manera importante y negativa. Los gatos tienen comportamientos similares relacionados con la ansiedad, siendo la inquietud, el temblor, la agresión y la disminución del apetito los problemas más preocupantes. El aislamiento y las actitudes antisociales también son comunes. Los medicamentos actuales que se utilizan para controlar la ansiedad y el estrés tienen tasas de respuesta limitadas y los efectos adversos suelen ser intolerables. Por estos motivos, el propósito de la revisión actual fue determinar el potencial del CBD como tratamiento para los trastornos relacionados con la ansiedad, mediante la evaluación de la evidencia de los estudios existentes.

MÉTODOS → Se realizó una búsqueda de artículos en inglés publicados hasta el 1 de enero de 2015 en MEDLINE, PsycINFO, Web of Science Scopus y la Biblioteca Cochrane. En total, se incluyeron 49 estudios primarios preclínicos, experimentales en humanos, clínicos y epidemiológicos.

RESULTADOS → De los 32 estudios preclínicos incluidos en la revisión, el 68,75% de ellos demostraron los efectos ansiolíticos del CBD , el 15,63% mostraron efectos panicolíticos (anti-pánico); el 9,34% demostró efectos anticompulsivos y el 12,5% ningún efecto; aún no se han informado efectos ansiogénicos. En un modelo de ansiedad inducida por el estrés, el CBD sistémico redujo los aumentos agudos de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, así como los efectos ansiogénicos retardados (24 horas). En un estudio subcrónico, el CBD administrado diariamente 1 hora después del estrés del depredador redujo los efectos ansiogénicos duraderos del estrés crónico del depredador. En un estudio crónico, el CBD sistémico evitó el aumento de la ansiedad producida por el estrés impredecible crónico. En un modelo de comportamiento compulsivo, el CBD mostró efectos panicolíticos en dos modelos propuestos de ataques de pánico y también en el modelo depredador-presa. Se investigaron los efectos anticompulsivos del CBD en el comportamiento de enterrar canicas (modelo TOC); El CBD sistémico agudo redujo el comportamiento de enterramiento de canicas hasta por 7 días. Finalmente, en modelos de miedo, el CBD sistémico redujo las respuestas cardiovasculares condicionadas; extinción mejorada de respuestas de miedo contextualmente condicionadas e incluso reconsolidación bloqueada de recuerdos aversivos en ratas. En resumen, el CBD exhibe una amplia gama de acciones, que incluyen acciones ansiolíticas, panicolíticas, anticompulsivas, disminución de la excitación autonómica, disminución de la expresión condicionada del miedo, mejora de la extinción del miedo, bloqueo de la reconsolidación y prevención de los efectos ansiogénicos a largo plazo del estrés. Además, la evidencia preclínica sugiere que el CBD tiene la ventaja de no producir efectos ansiogénicos a dosis más altas, a diferencia de otros agentes.

Pasando a los estudios clínicos y experimentales en humanos, la evidencia demuestra que el CBD redujo de manera potente la ansiedad o el miedo inducidos experimentalmente y la ansiedad asociada con una prueba simulada de hablar en público en sujetos sanos y en sujetos con trastorno de ansiedad social (SAD). Finalmente, el CBD mejoró la extinción de los recuerdos del miedo en voluntarios sanos, lo que sugiere un potencial para el tratamiento del TEPT. Con respecto a los estudios crónicos, actualmente no hay datos de resultados disponibles con respecto a los efectos crónicos del CBD en humanos. Los hallazgos experimentales en humanos respaldan los hallazgos preclínicos y también sugieren una falta de efectos ansiogénicos, efectos sedantes mínimos y un excelente perfil de seguridad.